Sobre mí

Mi viaje espiritual comenzó como tutora y profesora de yoga en el año 2000, cuando completé varias formaciones y seminarios en cuántica, yoga y aromaterapia. Ha sido un viaje maravillosamente poderoso durante muchos años, conduciendo y compartiendo el conocimiento del Universo con tanta gente en sus seminarios y entrenamientos, con el objetivo del desenvolvimiento de cada Alma. A través de diferentes conocimientos, a través del yoga, a través de diferentes encuentros, me expandí personalmente y también aprendí a MÍ MISMA. Es el don más poderoso y milagroso en el que no hay bien ni mal, ni final ni principio: sólo hay un viaje, un viaje cósmico. Cada vez más, yo misma recibía orientación del Universo, de un Yo superior, de mi propio Espíritu. Todos mis estudios y mi formación han sido una expansión.

Mi viaje hacia la Geometría Sagrada, los Códigos de Luz, ha sido una serie de paseos por el valle y de ascensos a las cimas de las montañas. Cada vez más claramente, el Universo se despliega para mí en mensajes, en códigos de luz. Estos mensajes milagrosos son una conversación con el universo a través de diferentes líneas temporales, en las que se está produciendo un desdoblamiento. El alma se abre, el conocimiento cósmico se activa.

La misión del alma

Todo el ser se cura, comienza a recibir nuevas energías que se elevan, disolviendo la densidad del cuerpo y de la mente. Los códigos de luz aparecen a través de un estado mental puro, ya sea universal o personal. Así como chupetes para el alma que abren todo el ser a la energía pura. Tanto en la liga actual Universalmente y personalmente. Leyendo, observando, inhalando o recargando el agua, los espacios, el estado de conciencia cambia, el cuerpo en todos sus aspectos comienza a sanar, a volverse cósmico de nuevo, despertando la antigua sabiduría cósmica. Todo mi conocimiento, toda mi sabiduría cósmica, la comparto con la humanidad a través del diseño de oro, a través del entrenamiento de oro, a través de códigos de luz, a través de poemas sagrados espolvoreados con néctares cósmicos de luz.

Por los encuentros maravillosos, tanto a través de mi trabajo como en persona.

En oro y luz

Neherana